¡Descubre cómo hacer el mejor cheesecake de queso con vino en pocos minutos y sin necesidad de horno!

Si eres amante del cheesecake esto es para ti, hoy traemos una receta que revolucionará tu manera de ver los postres. ¿Alguna vez has tenido un repentino antojo de postre, pero no quieres encender el horno? ¿O simplemente buscas ideas de postre que sean rápidas y fáciles? Pues bien, la receta del día es un exquisito cheesecake de queso con vino sin horno. Un postre sin horno que te garantiza deleitar tu paladar en solo minutos.

Cheesecake de queso con vino tinto
¿Quieres una receta fácil y rápida que conquiste tus sentidos? Sumérgete en este cheesecake que combina la cremosidad del queso con la sofisticación del vino tinto. A continuación, te presentamos los ingredientes y pasos para que en minutos tengas listo este delicioso postre sin horno.
Ingredientes para la base:
174 gramos de galleta maría
¼ de taza de mantequilla derretida
1 cucharada de azúcar
Ingredientes para el relleno:
570 gramos de queso crema
1/3 de taza de yogur natural
½ taza de azúcar
½ cucharada de vainilla
2 huevos
Ingredientes para el relleno:
570 gramos de queso crema
1/3 de taza de yogur natural
½ taza de azúcar
½ cucharada de vainilla
2 huevos
Ingredientes para la gelatina:
1 sobre de gelatina sin sabor
1 taza de vino tinto
1 taza de agua
1 cucharada de azúcar

Preparación del Chessecake de Queso con Vino Tinto
Preparando la base del cheesecake:
Comienza por triturar las galletas maría en un procesador de alimentos o licuadora hasta obtener una textura similar a la arena. Esta será la base crujiente de tu postre sin horno.
En un bol, mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida y una cucharada de azúcar. Integra bien hasta que la mezcla quede uniforme.
Vierte la mezcla en un molde para tartas, preferentemente desmontable, previamente cubierto con papel vegetal. Esto facilitará el desmolde al finalizar. Presiona firmemente para que la base quede bien compacta. Refrigera mientras preparas el relleno.
Preparar el relleno cremoso:
En una licuadora o mezcladora, combina el queso crema, yogur natural, azúcar, vainilla y los huevos. Asegúrate de añadirlos en ese orden para garantizar una mezcla suave y sin grumos, ideal para nuestro antojo de postre.
Licúa hasta conseguir una mezcla homogénea y suave.
Vierte esta mezcla sobre la base de galleta ya refrigerada. Alisa la superficie con una espátula para que quede uniforme.
Preparar la gelatina de vino tinto:
En un recipiente pequeño, combina la gelatina sin sabor con agua caliente. Remueve hasta que se disuelva por completo.
Añade la cucharada de azúcar y la taza de vino tinto al recipiente. Revuelve hasta integrar bien todos los ingredientes.
Una vez que la gelatina esté tibia (no caliente), viértela cuidadosamente sobre el relleno de queso en el molde.
Refrigera el cheesecake durante 6 a 12 horas para que tome consistencia y la gelatina cuaje por completo.

Presentación:
Desmolda con cuidado tu chessecake de queso con vino tinto. Si lo deseas, adorna con frutas frescas, como frambuesas o moras, para darle un toque fresco y colorido.
¡Ahora sabes cómo hacer un chessecake perfecto para cualquier ocasión! ¡Disfruta de tu obra maestra culinaria!

¿Cuáles son los cheesecake que puedes hacer sin horno?
Si te encantó la idea del cheesecake de queso con vino y estás en busca de más ideas de postre que no requieran horno, estás en el lugar correcto. Existen innumerables variantes del clásico cheesecake que puedes preparar en minutos, perfectas para cuando tienes ese antojo de postre inesperado. Aquí te dejamos una lista de opciones deliciosas:
Cheesecake de maracuyá y chocolate
Cheesecake de limón con mango sin horno
Cheesecake de glorias sin horno
Cheesecake de fresa bajo en azúcar
Cheesecake de horchata
Cheesecake de nutella
Cheesecake de yogurt con mandarina

Fuente: KiwiLimón Fotos: Internet

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